miércoles, 26 de diciembre de 2012

Trasplante y cambio de maceta

Suelo trasplantar los espinos por estas fechas tan prematuras. Si viene el invierno suave a finales de enero estarán brotados. 
Este que os muestro ya fue presentado en otra ocasión.
Llevaba dos años en una maceta del bazar chino y se merecía mejorar.
Aprovechando la visita al Congreso Gallego en Bembibre (Santiago de C.) compré una mas adecuada.


Lo primero retirar el musgo viejo de la superficie del sustrato.

 Limpieza del musgo que subía colonizando la parte baja del tronco.
Un ligero cepillado para dejarlo bien limpio.
Retirada del sustrato viejo.

 Arreglo de las raices que formarán el nevari, eliminando alguna que crecía a distinta altura.

 Y para finalizar bien atadito y palilleando sustrato nuevo.
 
 Visto por la parte trasera.

 Por un lado
Por el otro lado.
Y por el frente.
                                              35 cm.

Y a estas horas ya picotea algo por el gallinero.
Feliz año nuevo y prósperas brotaciones.
Un saludo.

 

lunes, 10 de diciembre de 2012

El gallito del corral.

Presume de mirar por encima del hombro (en este caso del ápice) de los demás miembros del gallinero.
Y no le falta razón.
No es el mas pesado, pero sí el de mas altura. Noventa y dos centímetros hasta la cresta.
Así estaba abandonado en un cajón de cultivo desde su recogida en el 98.






Recién quitado el último alambrado y a falta de volver a repetir la operación.




Después de bastante rato de alambre para aquí, alambre para allá.
Ramita para arriba, ramita para abajo.





Le falta plumaje y años de gallinero.
Posando con él antes de volver a su sitio en el gallinero.




Un saludo.

lunes, 3 de diciembre de 2012

El espino degradado

El 2010 fue un año muy prolífico en recogida de espinos.
En una de esas incursiones se vino conmigo este que os muestro.





Una vez en casa, viéndolo con mas detalle se convierte en un pozo de defectos.
El primer tramo del tronco (tachiagari) puede pasar el visto bueno con un aprobadillo.
Pero el resto nunca aprobaría ninguna asignatura, por lo menos bajo mi visión y mis recursos técnicos.
Dos tramos rectos enlazados con una curva en forma de codo. En algunos puntos conicidad inversa.
Por contra en ese tramo tiene una corteza bastante buena.
Al año siguiente sacrifico esa corteza y haciendo uso de la tan conocida técnica ATPC degrado esta gallina a sohin.
Y así empezamos de cero la historia de este pollo mas manejable.




Creciéndole las plumas.




No sé si fue ganas de ir adelantando trabajo o mono de trasplantes así que me puse a ello. Al fin y al cabo los espinos madrugan mucho a brotar.

Un alambrado previo. Pensaba trabajarle mas la zona del corte, pero me rompió la fresa de desbastar hace días. Quedará para otra ocasíón.









Y después de pasarlo a una maceta tokoname descatalogada ya corretea por el gallinero






Por un lado 




Por el otro




Por un frente




Por el otro.




Su corta historia no da para mas, pero ya se ve por donde van los tiros.
Un saludo.

 

domingo, 25 de noviembre de 2012

El primogénito

Soy un vulgar y abundante pino silvestre. De mi corta vida en el monte apenas tengo recuerdos.
El destino había querido que brotara de una semilla caida al borde de un camino. Otros de mis congéneres habían corrido mejor suerte (o eso creía yo) al haber nacido en un lugar menos transitado.
A pesar de que en varias ocasiones haya sido aplastado por las ruedas de un todoterreno, disfrutaba de la fuerte insolación y los fríos invernales que me proporcionaba vivir a mas de mil metros de altitud.
Corría el año 1992 cuando un degenerado me arrancó violentamente de mi hogar y luego de envolverme cuidadosamente me introdujo en plena oscuridad (luego sabría que aquello era el maletero de un automovil).
Ya en su casa ató mis tiernas y jóvenes raices sobre un pedrolo y me buscó un pequeñito apartamento en donde pasé el resto del año.
Mi luego amigo y compañero se disculpó conmigo contándome que lo había visto en un libro de un tal Dan Barton que le acababan de regalar.
A pesar de la cabronada me recuperé en poco tiempo y al cabo de un año lucía así de hermoso.
Me adapté al escaso y distinto suelo. Me resigné a vivir en aquel pequeño habitáculo. Incluso comenzé a hacer piña con aquel pedrusco.
Pero aquellas torturas no habían hecho nada mas que comenzar.
Un día se acercó a mi con unas herramientas y alambres y de nuevo llegó el sufrimiento.
Comenzó a cortarme ramas. Atarme con alambres y doblarme como si yo fuera de goma.
Incluso, unos pocos años después de haberme arrancado de mi hogar, osó exhibirme como mono de feria en alguna exposición local.
Esos añitos transcurrieron entre alambrados y cuidados.



Pero a los siete años de convivencia surgió el desamor. Pensé en una crisis de pareja, pero yo no entendía como me podía dejar casi abandonado de la noche a la mañana.
Había un desequilibrio en nuestra relación. Él podía vivir sin mi, pero yo no lo podía hacer sin él, sin sus cuidados ni sus mimos.
En ese período oscuro tuve noticia de que un incendio había sesgado la vida de todos aquellos hermanos a los que yo envidiaba por haber nacido en un sitio mas afortunado.
Al final, y a pesar de mis problemas de abandono actual, yo había pasado a ser el afortunado sobreviviente.


 Hace poco mas de cuatro años en que aquellos sentimientos que en otro tiempo nos habían unido han resurgido.
Comenzó con los mimos y cuidados de antaño. Me cambió a un apartamento mas ámplio y dejó que me pusiera fuerte.
Volvió a rodearme de alambres y a retorcerme, pero me da que lo hizo sin mucho convencimiento. Cuando pasaba junto a mi me miraba raro. No le gustaba.

Nuevo apartamento y creciendo a mi aire. Año sabático.
Ya me imaginaba yo que ese estado iba a ser pasajero.
Como ya comienza a ser habitual en mi vida he vuelto a pasar por quirófano.








Yo creo que esta vez se ha esmerado mas conmigo.
A falta de algunos detalles me ha dejado de esta guisa.
Por un lado




Por el otro lado.



Por detrás.


 Por delante.





P.D.
Probablemente no sea la mejor pieza de mi gallinero.
Tampoco el mas grande. Ni el mas gordo, ni el mas formado, ni el mas vistoso....
Pero, a pesar de mis pocos y chapuceros cuidados, de los que dan fé las imágenes, lleva conmigo veinte años. Le tengo un especial cariño.
Si pudiera establecer un vínculo mas humano con él seguro que compartiríamos vicisitudes.
Un saludo para todos. 
  

viernes, 9 de noviembre de 2012

Veranillo de San Martín

Hoy se ha puesto una tarde primaveral. Sol y temperaturas muy suaves.
Todo esto ha hecho que haya cambiado los trabajos de gubia en el interior por un trabajo de gallinero, a pleno sol.
Este pino ya lo he puesto en una entrada anterior.
A finales de verano lo he desalambrado para evitar que con el engrosamiento otoñál se clavara el alambre.
Pero ya sabeis que las coníferas necesitan ser alambradas varias veces hasta lograr dejar posicionadas las ramas sin alambre.
Ya sin alambre algunas ramas has perdido su posición inicial.
Y este es su aspecto luego de una pequeña sesión de alambrado.
Un saludo para todos.
 

miércoles, 31 de octubre de 2012

Buscando pedrolos

Como me viene sucediendo en estos tres últimos años por estas fechas, mientras dejo otoñar mis árboles, alterno el alambrado de algunos pinos con la búsqueda de piedras interesantes y el tallado de su daiza.
Esta última semana he salido varias veces a mi terreno, o sea a los montes cercanos.
 ¡Será por piedras!



Algún arbolito aprovechable.
Parece el duende que habita en el bosque.
Cargando el maletero.

Algunas de las piedras recién limpiadas.
Comenzando el tallado de daizas.
Cuando estén acabadas subiré algunas fotos.
Espero que os guste.
Un saludo.